Considero que toda experiencia laboral tiene valor en el sentido de que va formando parte del trayecto propio - y singular - en el mundo del trabajo.
Hace unos años, llevaba adelante la búsqueda laboral orientada a un/a estudiante capaz de ocupar una posición en el área administrativa-contable.
Utilicé diferentes portales y retomé contacto con instituciones que pudieran facilitarle la información sobre el puesto de trabajo a sus estudiantes.
Una vez que ya había recibido numerosos curriculums noté que en el cuerpo del email me contaban algunos/as estudiantes que no tenían experiencia en el sector administrativo-contable y en ningún otro lugar.
Sin embargo, cuando visualicé el CV de un candidato en particular, me encontré que en la sección de "experiencia laboral" figuraba el trabajo desempeñado en un negocio familiar.
Esto me hizo pensar acerca del motivo por el cual no se consideraba esta experiencia como parte del trayecto laboral, pero sí se mencionaba tímidamente en el CV.
Decidí responder el email del candidato, no solo confirmando que había recibido correctamente su CV, sino consultándole acerca de dicha experiencia en el negocio.
Del intercambio de mensajes, concluyo que el joven postulante había trabajado durante un tiempo en el negocio de su familia, realizando diversas tareas, desarrollando habilidades muy importantes (sobre todo habilidades soft) que - y estoy segura de ello- luego lo acompañarán en el futuro laboral. Pero él no lo había notado.
Sugerí que ampliara en su CV detalles de dicha experiencia. Porque toda experiencia laboral tiene valor, sea un negocio familiar de un rubro diferente al que se prefiera en ese momento, un trabajo informal, un empleo por temporada. Todo tiene valor.
Pero es importante que primero lo valoremos nosotros. Para luego visibilizar esta experiencia en el mercado laboral con confianza.
Gracias por leer hasta acá!
Te invito a tomar acción en la búsqueda de tu desarrollo profesional!
